El cuerpo presenta rastros de tortura y tenía incrustado varios impactos de bala, además una de mano amputada. A un costado del cadáver se halló una cartulina con la inscripción en portugués cuya traducción es: Justicieros de la frontera. No robar en la frontera. Esto es solo el comienzo.
La pareja del ahora fallecido, indicó que la noche de viernes, llegaron a su casa unos hombres armados que preguntaron por su marido lo alzaron a la fuerza a un automóvil blanco y huyeron del lugar. La misma radicó denuncia en la Subcomisaría Número 4 del barrio San Juan Neumann.
El hallazgo fue al costado de la ruta que une la ciudad de Ponta Porã con Dourados, a unos 3 kilómetros del casco urbano, en las inmediaciones del “Clube do Laço”.
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